Fragancias entre el cielo y la tierra
“El hombre es un océano; La mujer es un lago. El océano tiene la perla que adorna;
El lago, la poesía que enciende (…) El hombre está colocado donde termina la tierra..
La mujer, donde comienza el cielo”
Victor Hugo
Es imprescindible ser un maestro como Víctor Hugo para decirlo con tanta sencillez y elegancia, pero así es lo femenino frente a lo masculino, el extracto del varón frente a la esencia de la fémina.
Del mismo modo se contraponen y complementan las dos grandes casas de velas perfumadas de Papillón: La nobleza y ancestral tradición de la casa francesa de Cire de Trudon, frente a la joven y floral esencia de la madre creadora de la que emanan las fragancias de Suniti Essence.
Sin olvidar al maestro creador, Enmanuelle Philip, la nariz, el perfumista de ambas casas y en cuyo imaginario olfativo caben infinidad de nuevos mundos, recuerdos y sueños que han sabido dar vida a éstas esencias de Cire de Trudon y las emociones de María Jurado para Suniti Essence
Gracias a Suniti Essence y Cire de Trudon, dos especialísimas casas de velas perfumadas, Papillón ha ganado el equilibrio entre lo femenino y lo masculino. Un mundo de sensaciones en el que ambas se complementan, creando la armonía que impulsa y ayuda a dar vida al espíritu de Papillón, el de un hogar en perfecto equilibrio con quién lo habita y le da forma.